La posada del silencio

Estos textos breves e inspirados de José Fernández Moratiel, O.P., alejados del discurso reflexivo y de la exhortación doctrinal, nos sugieren un camino sutil y profundo para aproximarnos a lo más esencial de nosotros mismos, al corazón de la Realidad, al Invisible que está en lo visible. El silencio es nuestra verdadera casa, nuestra verdadera patria, nuestro verdadero hogar. El silencio, instrumento aparentemente frágil pero inmensamente poderoso, barre el estruendo vacío del mundo y del alma, nos devuelve a la vida pura e inocente y nos acerca a Dios, que es puro desierto, puro vacío, puro amor. Las ilustraciones de Carmen M.ª Hernández que acompañan el texto transmiten acertadamente el mensaje del silencio.